martes, 15 de enero de 2013

Bálsamo para las heridas.

Ballet Nacional de España. Jueves 11 de Enero de 2013.
Paso a cuatro.
Farruca.
Viva Navarra.
Jota "La Dolores".
Suite Sevilla.

OSRM, dirección Cesar Alvarez. Viernes 12 de Enero de 2013.
Juego de Cartas de Igor Stravinsky.
Sinfonía nº 1, “Clásica” de S. Prokofiev.
Sinfonía nº 1 de Shostakovich.

Las necesidades de ajustar la programación del auditorio regional, nos ha hecho gozar esta semana de dos noches seguidas de esas que encogen el corazón y nos reconcilian con el ser humano, gracias a su gran capacidad de generar belleza.

El pasado jueves asistimos a un espectáculo del Ballet Nacional de España, que solo podemos calificar como único. La calidad de las coreografías, la sobriedad de la puesta en escena y la tremenda capacidad de los bailarines para generar imágenes de alta plasticidad deben cerrar muchas bocas que no son capaces de ver el valor de invertir incluso en momentos difíciles, en recursos culturales de base.
En una sesión que fue ganado en intensidad la jota de “La dolores”, en la que pudimos gozar de una alegría y velocidad en la ejecución de las bailarinas que hacen olvidar por momentos nuestra triste y corrupta situación, puso un broche vibrante a la primera mitad de la gala.
La suite Sevilla, fusión de aires tradicionales y modernos, fue el plato fuerte con escenas de gran belleza y valor estético fruto de la gran coreografía de Antonio Najarro y del buen hacer de los bailarines. Al final el numeroso público mostró su satisfacción. incluso la de los que como en mi caso, no somos grandes aficionados a la danza española.

El día siguientes tuvimos el reverso de entrada, que no de calidad, en el concierto de la Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia, bajo la batuta de Cesar Alvarez.
Con un programa estrictamente ruso en el que dos obras poco usuales y exigentes, tanto para músicos como para espectadores, acompañan a la preciosa y conocida Sinfonía Nº 1 de Prokofiev. Cesar Alvarez nos desquito en este concierto de la anterior sesión de la OSRM bajo la dirección de Leonardo Martinez.
Alvarez llevo la nave de la OSRM a muy buen puerto sacando lo mejor de los músicos y ganadose una ovación, poco numerosa dado la paupérrima entrada de la noche, pero entusiasta e intensa.
La pena es la poca estima que demuestra el público en general a esta orquesta, sobre todo teniendo en cuenta su precaria situación y el desinterés de nuestro nefasto consejero de cultura, más preocupado de sus francachelas con amiguetes que en generar una autentica infraestructura cultural en la región, como es el caso de una orquesta sinfónica de calidad.

Prokofiev según Lorin Mazzel y la Orquesta Nacional de Francia.

¡Esta música, suena mejor en directo!

En fin, disfrutemos y demos apoyo a estos sufridos profesionales que se lo merecen y mucho.