viernes, 12 de agosto de 2011

La interprete.

“The interpreter”, EEUU.
Director: Sydney Pollack.
Reparto: Nikole Kidman, Sean Penn y Catherine Kreener.
Universal, 2005.
128'.

A estas alturas de su carrera seria raro que Sydney Pollack firmara malas películas. Su dominio del oficio y de los resortes del lenguaje cinematográfico garantizan “de facto” una correcta factura.
Y como correcta cabe describir esta película muy en la linea del cine político de los 70 y 80 del siglo pasado. Entre tanto subproducto actual de super héroes reciclados, adaptaciones de mediocres best-sellers y refritos de series televisivas, este genero ligeramente agotado fue un soplo de aire fresco en el triste panorama del cine americano. A pesar de todo no pasa de correcta ya que si bien la cinta esta bien estructurada y es entretenida, presenta unos personajes un tanto planos, incluso poco creíbles a veces, una temática muy visitada por los guionistas y unos golpes de efecto previsibles. Es decir, no aporta nada nuevo al genero.



No obstante se deja ver con agrado durante sus 128 minutos.

Calificación: Entretenida.

martes, 9 de agosto de 2011

Malditos Bastardos.

"Inglorious basterds"
Director: Quentin Tarantino.
Reparto: Brad Pitt, Melanie Laurent, Cristhp Walz y Eli Roth.
Universal, 2009.

Que Tarantino es un buen director aunque limitado en sus capacidades esta claro, al menos para mi. También lo esta que es un gran amante de las películas de serie B. Y un cachondo mental.



Aquí revisa las películas de espiás de la II Guerra Mundial, con alemanes malisimos, resistentes franceses y comandos americanos aguerridos. El material básico de “Casablanca”, en resumen. Pero Tarantino es Tarantino y al final tenemos una muestra de lo que mejor hace: Una película, sarcástica, ultraviolenta, sorprendente y muy divertida. Una especie de remake sangriento y gamberro del “Ser o no ser” de Lubitch. Claro que se le quedan incoherencias y ciertos fallos de factura, pero que se pierden en el desenfrenado festival de acción de la cinta.

Valoración: Entretenido.

lunes, 8 de agosto de 2011

Kafka en la orilla.

Haruki Murakami.

2002.
Traducción del japones de Lourdes Porta.
Circulo de lectores. 2007 (Tusquest,2006)


“Dentro de poco te dormirás. Y al despertar habrás pasado a formar parte de un nuevo mundo” .

Con estas sugerentes palabras termina Murakami esta novela entre mágica e iniciatica, en el que muchos elementos que ya habíamos visto en “Tokio blues” se revisitan pero con un giro hacia la metafísica e incluso la fantasía. La soledad e incomunicación en un mundo alienado y que lleva al vacío a sus pobladores, la búsqueda platónica de la pareja perfecta, del circulo cerrado formado por dos personas pero que inevitablemente se rompe entre un gran dolor y las difíciles y equivocas relaciones entre sexos, van llenando de fondo el relato de dos viajes tangentes e inusuales. Sus protagonistas, el joven Kafka y el sexagenario Nakata, impelidos por una fuerza propia de una tragedia griega, se ven secundados positiva y negativamente por personajes, a cual mas interesante y que al final trasmiten una sensación de inquietante esperanza.

El resultado es brillante, con un comienzo algo lento que se cierra con una tremenda escena de Nakata, tras la cual, si se supera, se abre una narración dinámica y absorbente en la que las fronteras ente el mundo “real” y el onírico van difuminándose poco a poco.

Valoración: Buena.